¿Qué vamos a trabajar?

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Tengo una visión distintiva de cómo las personas cambian y, por lo tanto, de lo que un servicio de terapia necesita ser.

Realizaré evaluaciones formales constantes de tu situación, discutiremos planes de acción, desarrollaremos habilidades y revisaremos regularmente tu progreso. Se que tu tiempo es limitado y estoy motivado para trabajar contigo y acelerar las evoluciones positivas.

Otorgo la facilidad y flexibilidad de llevar a cabo tu proceso de forma virtual y/o presencial, sin variación de precios. Si resides en la ciudad de Guayaquil, este sera un beneficio accesible para ti.

Adicional, contaras regularmente con material de lectura, contenido didáctico y contacto conmigo 24/7 en todo el proceso. Mi intención es brindar un servicio integral que atenderá todas tus necesidades psicológicas.

En mi consulta privada trabajo con adultos jóvenes que están lidiando con pensamientos y patrones poco saludables que surgen de la ansiedad, la depresión, relaciones difíciles o una falta general de satisfacción.

Quizás tu vida parece estar "en orden", pero te encuentras luchando cada día: te sientes emocionalmente agotado, te desplazas sin rumbo en las redes sociales o te sientes atrapado en la trampa de la comparación. Puede que empieces a notar el impacto de esto en tus relaciones, tu carrera o tu sentido de valor personal.

Si esto te suena familiar, comencemos. Nuestro trabajo juntos puede ayudarte a identificar las posibles barreras en tu vida y a romper hábitos poco saludables.

Me alegra que preguntes. Mi forma de trabajo se resume en dos cualidades: concisión y dinamismo. Esto es porque integro los modelos y herramientas de la Terapia de Aceptación y Compromiso, la Terapia de Activación Conductual y la Terapia Cognitivo-Conductual, que me permiten desarrollar un proceso personalizado y eficaz para ti.

La duración del tratamiento varía según los temas abordados y tu progreso. A medida que se adquieren recursos para afrontar los desafíos y se cumplen los objetivos terapéuticos, las sesiones se espacian gradualmente, pasando de semanas a meses, hasta alcanzar el alta.

Pero si deseas una cifra más exacta, oriento cada proceso a tener una extensión entre 8 a 12 sesiones; las mismas pueden aumentar según lo que te comentaba con anterioridad.

En una sesión de terapia, el enfoque está en crear un ambiente seguro y de apoyo donde puedas explorar tus pensamientos, sentimientos y comportamientos.

Yo guio la conversación para ayudarte a obtener información sobre tus patrones de pensamiento y comportamiento, explorar experiencias pasadas o desarrollar nuevas estrategias de afrontamiento. Dependiendo de los objetivos terapéuticos, la sesión podría incluir técnicas específicas como la reestructuración cognitiva, ejercicios de mindfulness o escenarios de juego de roles. Mi papel es escuchar, brindar retroalimentación y ofrecer herramientas para ayudarte a hacer cambios positivos, siempre trabajando de manera colaborativa.

Las sesiones suelen programarse regularmente, a menudo semanalmente, y pueden durar entre 45 y 60 minutos. El enfoque está en hacer progresos sostenibles e incrementales, con cada sesión construyendo sobre la anterior, ayudándote a avanzar hacia tus objetivos.

La terapia es un esfuerzo colaborativo, donde tú y yo trabajamos juntos como un equipo. Mientras que yo como terapeuta aporto experiencia profesional y orientación, tú aportas valiosos conocimientos sobre tus propias experiencias.

Tu rol es ser abierto, honesto y estar comprometido con el proceso. Esto significa compartir lo que tienes en mente, estar dispuesto a explorar emociones difíciles y discutir cualquier desafío o progreso que estés experimentando.

También es importante recordar que tú eres quien, en última instancia, hace el cambio. Yo puedo ofrecer herramientas, perspectivas y apoyo, pero eres tú quien las pone en práctica en tu vida diaria. Esto puede implicar probar nuevas estrategias de afrontamiento, reflexionar sobre tus sesiones entre encuentros o desafiarte a pensar de manera diferente sobre ciertas situaciones.

Tu rol también incluye comunicarte conmigo sobre lo que funciona y lo que no. La terapia es un espacio donde tu retroalimentación es esencial para asegurar que el proceso se adapte a tus necesidades y objetivos.